ENTRE MADEROS Y DOLORES,
NIEVE Y SEQUÍA,
HIERRO Y ALGODÓN,
ENTRE LA NIEBLA SE FUGO LA POESÍA, CON SU DESDICHA, LA VIUDEZ DE SER MUDA.
UN DÍA SE SENTÓ EN EL MONTE A ESCUCHAR LA BRISA, Y LE ENCANTÓ TANTO LO QUE OIA, QUE SE OLVIDÓ DE HABLAR,,
UN DIA LO INTENTO DE NUEVO, PERO YA NADA LE SALIÓ..
YA LÀGRIMAS NO BROTABAN DE TUS OJOS,
SONRISAS NO BROTABAN DE SU BOCA, NI ABRAZOS DE SUS BRAZOS.
SE QUEDÒ PRETIFICADA OYENDO LA BRISA,, SUS OJOS PERDIDOS ENTRE GLOBOS DE ALUCINANTES COLORES, SIN LLAMA APARENTE, SIMPLEMENTES SUSPENDIDOS EN EL ESPACIO…
DESPUES DE MIRAR TANTO EL CIELO, DESCRUBRIÓ QUE SÒLO ERA AZUL CUANDO SE LO MIRABA DE REOJO… PERO AL OBSERVARLO POR TANTO TIEMPO, SE TORNABA GRISÀSEO.
COMO SU INSPIRACIÓN, INMUNE A LA SENSIBILIDAD. INMUNE A SENTIR, LOS ZUMBIDOS DE LAS ABEJAS, LAS CAIDAS DE LOS ALFILERES, LOS ROCES DE LOS PÈTALOS.
SUS ILUSIONES HABLAN EN SILENCIO, CON DISTINTOS ACENTOS,
LA IRA SE APODERA DE SUS VERSOS, IRA SIN RAZON,
LA IRA QUE SE HACE PRESENTE UNA VEZ MAS , AL NO PODER TERMINAR NI ESTE INTENTO DE VERSO..